Tu a cantar y yo a desfilar: El amor, la moda y la música.

Moda y música, música y moda. Seguro que habréis leído ya mil posts en otros blogs sobre el tema; que Gaultier le hizo el vestuario a Madonna en los 90, que si Amy diseñó para Fred Perry, que si Lady Gaga ahora lleva una bata de cola con 300 gorriones muertos cosidos… lo típico. Pues bien, en CalamityCool somos muy observadores y sabemos lo que os gusta, y nos hemos dado cuenta de que Sálvame tiene más audiencia que los documentales de La 2 así que no vamos a enfocar esto desde el rigor periodístico que nos caracteriza y por el que tanto nos amáis, sino que os vamos a dar carnaza: la música y la moda unidas por el amor (o intereses comunes, que no nos vamos a pillar las manos nosotros). Y hay de todo, que no siempre da buenos resultados estilísticamente hablando.

Kate Moss y Jamie Hince: Los primeros en pasar por caja son, como no podía ser de otra manera, nuestra niña bonita y marido. Ella tiene un imán para los músicos y a él le ha tocado la lotería porque con semejante mujer al lado da exactamente igual que tú SIEMPRE elijas los zapatos más feos del mundo porque nadie te va a hacer caso. su estilo como pareja podría definirse como una mezcla perfecta entre (preparaos que ahí va la palabra) vintage y rockabilly, que saben adaptar a cualquier situación. Larga vida a este matrimonio, que cuando se lo proponen nos dejan looks de babear como el que lucieron en su despedida de solteros conjunta.

Andrés Velencoso y Kylie Minogue: Nuestra única representación patria en el post. Andrés ya lleva muchos años en esto, aunque parece que no le ha venido nada mal su relación con la australiana (no estamos insinuando NADA). La diferencia de edad se queda en nada cuando aparece la diferencia de estatura; y es que el hecho de que ella quepa en uno de sus zapatos unido a la desgana que le ponen ambos a la hora de elegir sus estilismos, puede provocar que en ocasiones no tengamos muy claro si son pareja o simplemente es que a Andrés le ha tocado ese fin de semana la custodia de la niña. Colores apagados, un uso excesivo complementos para el cuello (¿vivís en Laponia?) y sosería en general sólo salvable en algún acto (en el que por lo menos se les ve algo de ganas). Nos quedamos con la foto de la nieve; el estilismo nos da igual pero parece que ella le está pidiendo que le compre cromos y chuches, y nos hace mucha gracia, la verdad.

Heidi Klum y Seal: Son muchas las sospechas que tenemos al respecto de la unión de esta pareja. Al final hemos decidido ser buenas personas y pensar que es que él tiene que ser un buenazo. Y es que parece ser que a ella le gusta él tal y como es, sino cómo se explica que ella suela ir siempre bastante acertada (incluso muy bien a veces) pero él vaya siempre que parece que lo acaban de sacar de un casino de Las Vegas y que muy probablemente le acaban de dar una paliza. El caso es que es una pareja que no tiene estilo de pareja; vuelan libre excepto en Halloween, que todo hay que decirlo, son los amos del lugar.

Oliver Cheshire y Pixie Lott: Él como modelo todavía ha hecho poco (aunque ya es habitual en Milán), pero es tan increíblemente mono que nos hemos inventado una carrera de éxitos y portadas para él en nuestra mente. Ella tiene una corta pero muy fructífera carrera musical, y pese a que no sea todavía internacionalmente conocida por su música, se las ha apañado para colocarse como una habitual en la mayoría del streetstyle de las celebrities. Son jóvenes, son guapos y son modernos; y ese es su estilo. A Pixie le pierde el estilo naif y babydoll y él los complementa con estilismos sencillos, con un puntazo preppy y dominando todas las tendencias que se le pongan por delante. No puedo elegir un estilismo, me los llevo todos.

¿Y vosotros con cuál os quedáis? ¿Se os ocurren otros ejemplos? ¿Creéis también que Seal debe ser muy buen tío?