Mercedes Benz Fashion Week Madrid F/W 2012. Pros y contras desde la distancia

Por motivos de agenda (como bien sabéis somos personas terriblemente ocupadas) este año no hemos podido asistir a la pasarela madrileña (no vamos a entrar en su cambio de nombre y utilizar expresiones que le quiten todavía más seriedad a nuestra primera pasarela), por eso y porque no había CoolPeople esta edición y así no hay ganas, no hay ganas. Por ello y porque ya habréis tenido ocasión de ver todas las crónicas, resúmenes y fotografías habidas y por haber sobre estos días, hemos decidido que mejor hacemos un único repaso con pros y contras de esta edición vista desde la distancia, que generalmente viene bien para la objetividad.

Por un lado aplaudimos el habernos encontrado con propuestas más comerciales, ropa que se puede vender y que puede sustentar un modelo de negocio que al parecer a nadie le importaba en pasadas temporadas. Especial mención a Davidelfin, que siempre ha tenido muy en cuenta la faceta comercial de sus colecciones pero que últimamente se había dormido en los laureles repitiéndose cual ajo y haciendo colecciones que si hubiera seguido acortando habría acabado presentando un par de calcetines en 2013. Pero esta vez lo ha hecho bien, una colección comercial, con su sello reconocible, diferente y aportando a su desfile esa parte de espectáculo que tanto echamos de menos en la pasarela. Y es que llamar a unos colegas y darles un micro no es tan caro, y funciona para salir en el telediario mejor o igual que poner bolsas en la cabeza y sogas a las modelos.

Otros que tiene bien aprendido lo de que hay que vender son los hermanos Ailanto. Una colección que, si bien vuelve a ser de lo que más nos gusta de esta edición, es más floja que la que presentaron en la edición pasada. Aires orientales para prendas que funcionan en total looks para pasarela o de manera individual en el mercado comercial. Muy bien Ailanto, cruzad la pasarela.

Otra de las cosas positivas que podemos reconocer es que la pasarela sabe cuidar a sus grandes valores. Esa gente que por amor a la misma o una ingente cantidad de dinero (inversión que considero un acierto por parte de la organización) acuden a la pasarela aunque todos sepamos que a nivel laboral poco les aporta. Casos como los modelos Marina Pérez, Iris Strubegger, Jon Kortajarena, Antonio Navas, Sebastian Sauve o Clement Chabernaud. O de diseñadores como Amaya Arzuaga, que con su segunda línea AA  de Amaya Arazuaga aporta un poco de ese caché e internacionalizad que le falta a la MBFWM.

Como último pro, que estamos demasiado de buenos y nos va a salir urticaria o algo, destacamos a diseñadores como Elisa Palomino o Maya Hansen, que sin ser comerciales como hablábamos anteriormente, han sabido encontrar su público y hacer que sus firmas funcionen. Al margen de que gusten o no al público general, son prendas que se venden y que en pasarela saben crear espectáculo, al mismo tiempo que han sido capaces de crear una imagen de marca potente que llama la atención incluso fuera de nuestras fronteras.

Para las cosas negativas nos vamos a remitir a las palabras de Txema Mirón, colaborador de Diane Pernet, que ha recogido José Luis Díez en su blog esmoquinroom y que me parecen acertadísimas: “En España no hay tanta creatividad como la gente se piensa. El problema para vender nuestra moda fuera es que muchos de nuestros diseñadores tiene un igual a nivel internacional que lo hace mejor que ellos. Y no pueden competir con él”. Pues bien, que alguien coja a Victorio & Lucchino y les hable de Prada y de MiuMiu, que al parecer creen que nadie los conoce y por eso han decidido fusilarles la colección. Me parece bien la idea de reinventarse, pero si es siendo original, mejor. Pero aunque el caso de los sevillanos sea el más escandaloso, es un mal que pesa en general en la pasarela.

Por último una de cal y otra de arena. Y es que nos gusta la idea del OFF y cómo se había planteado desde un principio, sobre todo porque el plantel de diseñadores era absolutamente genial. Sin embargo, los problemas de la organización han dado como resultado un OFF recortado, en el que echamos en falta nombres tan interesantes como el de Antonio García, cuya colección será finalmente presentada en Valencia. Una buena idea (la de los OFF) parcialmente desperdiciada. Pero por otro lado nos permitió ver a gente que nos gusta tanto como Alvarno o Rabaneda. Desfiles que esperábamos con ganas y en los que se agradece que busquen nuevos espacios y se alejen de el pabellón 14 de IFEMA y su horrible horrible moqueta.

Y eso es todo nuestra Mercedes Benz Madrid Fashion Ween. En Septiembre volveremos con información in situ. Over & out.