Kids Choice Awards 2012: El repaso

Nos pirran las entregas de premios y las alfombras rojas. Eso lo sabéis vosotros, lo sabemos nosotros y probablemente lo entienda hasta Chayo Mohedano. Cada vez son más los que comentamos y es muy probable que a este ritmo acabemos comentando los premios MAX de teatro o los Odor-Eaters Rotten Sneakers Contest. Y es que nos hemos dado cuenta de que a vosotros también os gusta esto de rajar de las estrellitas de turno paseando modelito de gala. Son guapas, ricas y tienen un trabajo divertido; que les piten los oídos es lo mínimo que el karma debería de otorgarles.

Este sábado fue el turno de los Kid’s Choice Awards 2012, premios entregados por los adolescentes americanos y el canal Nickelblablablablabla. Al lío. La alfombra era naranja; es toda la información que necesitáis.

El combo Taylor-pesada-Swift y Michelle Obama es algo que no nos veíamos venir, pero ahí están, la primera vestida de María Lucía Hohan, empalagosa a más no poder como siempre y con zapatos del Shana. Si me quito los prejuicios la verdad es que no va mal, pero me vienen de serie y no me los puedo quitar. Así son las cosas. Por otro lado Micaela Obama de Wes Gordon. No entiendo muy bien qué lleva a alguien a ponerse jeggins siendo primera dama, al igual que tampoco entiendo dónde dejó el yelmo y la lanza y quién ganó el torneo medieval del que venía.

Selena Gómez se mueve entre la fina línea que separa el look juvenil del look de fresca. Lleva top y falda de Dolce & Gabbana y su habitual pelo de Selena Quintanilla. Los zapatos coral no me disgustan, pero creo que alguien debería haberla avisado de que la alfombra era naranja.

A Sarah Hyland sí que nadie la avisó del color de la alfombra. Se plantó encima de la moqueta naranja con un vestido de Myne y sandalias de Cesare Paciotti. ¿Vestido largo con raja para una chica de su edad? Quizá hubiera estado mejor un traje corto, pero la verdad es que el corte del vestido hace que no desentone demasiado. Es un alivio ver que su pierna no tiene vida propia como la pierna de Angelina. Aprobado raspadillo.

Katy Perry vestida de tienda de Movistar. No sé si la falda es así o se le ha quedado enganchada después de hacer pis. Espero que sea lo segundo. El maravilloso diseñador de ESO es Gerlan Jeans. Por si lo queréis para vuestra puesta de largo o algo.

Emma Stone es siempre tan perfecta que las únicas opciones que nos quedan es sacrificarla a los dioses para que se arregle la crisis o ponerle un aro metálico en la cabeza para engancharle las llaves y acariciarle la carita cada hora en punto. Se ha plantado un sencillo vestido de Antonio Berardi en rosa pálido y unas cuñas no demasiado altas y ahí está, partiendo la pana. La única pregunta que me hago con ella es ¿me gusta más de rubia o de pelirroja? y la respuesta es SÍ.

Kelly Osbourne últimamente no deja de sorprenderme. Ha hecho una dieta que ni Rosa de España y se ha quedado estupendísima. Optó por un siempre correcto little black dress de Tony Ward y unos zapatos rosas. Combinar zapatos y pelo es el nuevo must. Lucía Bosé, trendsetter.

El vestido de Stella McCartney es de 10. Los zapatos son de 10. El pelo es de 10. El maquillaje es de 10. Sus hechuras y su pose son de estar repostando gasóleo en su trailer de transporte de mercancías peligrosas en la Nacional-320 entre Albacete y Tarazona de la Mancha. Alguien (quizá su estupendo novio) debería darle a Kirsten Stewart unas clases de postura y protocolo, porque es una penita.

¿Sabía Heidi Klum que iba a unos premios otorgados por ADOLESCENTES? ¿Habrá oído alguna vez hablar de la palabra HORMONAS? Quién sabe. El caso es que ella se enfundó este mini de Roland Mouret con unas mosqueteras y se fue a pasear su recién adquirida soltería por la alfombra naranja. Poco apropiado, pero con ese cuerpo se le perdona todo.

No sé quién es, la verdad. Sé que se llama Victoria Justice (que como nombre es bastante molón, no nos vamos a engañar). También sé que tendrá página en la wikipedia y que todo sería mucho más fácil si la buscara, pero prefiero que lo hagáis vosotros y así fomentamos la interactividad en este blog, en plan pioneros. Esta amable desconocida es probablemente mi favorita aunque la elección de esos botines se me antoje extraña. Lleva traje coral de Elisabeth and James y botines de Valentino. Las piernazas y el pelazo son suyos propios. Muy bien.

En cuanto a los chicos, además de la imposibilidad de saber de quién visten, poca cosa. Maravilloso Andrew Garfield con traje burdeos, probablemente aconsejado por su noviecita Emma Stone – os damos estos datos porque estamos en campaña para que nos fiche la Cuore- y pelo perfecto. Alguien que sabe ser elegante sin ir recargado. Te queremos Andrew.

Chris Colfer iba a sacar la basura y se vio allí en medio sin darse cuenta. Lo de posar con las manos en los bolsillos de la chaqueta en plan rapero y los pies a las 15:45 debe ser algo que se lleve mucho allí y aquí no lo entendemos. Diferencias culturales.

Josh Hutcherson, el que probablemente sea el nuevo chico de moda después de protagonizar Los Juegos del Hambre debería tomarse esto un poco más en serio. ¿Esas botas de trekking a qué vienen? ¿eres pronador o supinador? Sea lo que sea, debería leer de vez en cuando nuestra sección Se Cuerpo, y saber que esa vueltita en los pantalones si mides 1,50 no son una buena idea.

Un veloz mosquito sale en el mismo instante de Madrid hacia Barcelona a una velocidad de 400 km/h. Cuando encuentra el tren que viene desde Barcelona, da la vuelta y vuela en dirección hacia Madrid, y al encontrar el tren que viene de la capital, da otra vez la vuelta volando de nuevo hacia Barcelona, siempre a la misma velocidad de 400 km/h. Y así sucesivamente hasta que los trenes se crucen en Zaragoza, en el punto medio. En ese momento, ¿cuántos kilómetros habrá recorrido el mosquito?