Evento Lina Costura y bloggers

Cuando recibimos la invitación para colaborar con Lina Costura, el Mr y yo entramos en una espiral de fantaseos en los que yo me imaginaba con un traje rojo pasión de los de la última gira de Isabel Pantoja y él con el mítico traje blanco que lució Grace Kelly. Luego nos pusimos Bridget Jones y con eso cerramos el cupo de feminidad para los próximos dos años. Puede que nada de esto pasara en realidad, lo que sí es verdad es que la espectacular trayectoria de esta casa artesana de costura flamenca no puede dejar indiferente a nadie.

Ellos estaban ahí cuando los trajes no sobrepasaban el tobillo y las axilas no estaban cubiertas, y de hecho fueron ellos los primeros en introducir este tipo de cambios, así como decidir que el mantoncillo iba a ser un perfecto complemento. Fue en 1980 cuando pasaron de los talleres a la tienda en la que desarrollamos la presentación del evento, en la que encontramos esta foto de cuando John Galliano visitó el taller de Lina y ya no pudimos sino amar.

El evento consistía en una colaboración por parte de la casa de moda flamenca con Vanity Fair mediante la cual seis bloggeras tendríamos la oportunidad de experimentar en primera persona cómo se siente una clienta de la firma, con el plus de que nosotros podríamos visitar en exclusiva el taller y tendríamos la posibiliad de conocer a las diseñadoras Mila y Rocío -que han tomado el relevo generacional de Lina y Francisco Montero- que nos comentaron cómo quieren huir del estereotipo de firma clásica e inaccesible para acercarse al público general y las nuevas tendencias, sin perder el cuidado por el detalle y la artesanía que los caracteriza. Tras esto pudimos elegir entre los diseños de la firma para una sesión de fotos en trajes de flamenca de Lina y utilizando la ropa interior de la nueva línea de básicos de Vanity Fair.

La fotografía de la sesión la realizó el grande e inigualable Alejandro Becé en la impresionante azotea cedida por Teresa Rabasco, y pronto se abrirá un concurso en facebook mediante el cual podréis votar vuestro estilismo flamenco favorito. Estaría muy mal que mendigara vuestros votos, muy mal… fatal… VOTADME.

Podíamos elegir el estilismo y los complementos, con lo que vosotros, queridos lectores, podréis imaginaros el desasosiego que esa elección supuso para mí al quererlos todos, algo parecido a cuando tuve que decidir si mandar un sms para votar por Carmen Miriam o por Davinia en la final de Popstars. Para mi traje, como ya me conocéis, sencilla y amiga de la discreción no pude sino decantarme por una espectacular BATA DE COLA en tono rosa pastel que tenía un mantón en gasa maquillaje con los mismos lunares y bordado en fucsia. El Mr se emocionaba como un buen padre en la función de fin de curso, sin hacer yo de árbol ni nada parecido. Por otro lado he de aclarar que la bata de cola era muy ligera y manejable, hasta el punto de estar planteandome incorporarla a mi vida diaria (y contároslo mediante el hashtag #ponunabatadecolaentuvida). Y es que como ya sabéis, cualquier discusión queda ganada si la terminas con una buena patada a la bata de cola y un portazo, como Lola Flores.

Ana de Mordiscodemujer, Elena de Mamádemayorquieroserflamenca y Esther de Only1woman

Beatriz de Quémonavaestachica, Gloria de Fashion-South Y .

Para terminar, no podemos despedirnos sin agradecer a Lina Costura y a sus responsables de comunicación por esta magnífica experiencia, así como a los demás participantes que nos hicieron pasar dos jornadas perfectas.